El Chiapaneco que participó en una Misión Análoga a Marte

Hector Palomeque Domínguez se ha convertido en el 1er Chiapaneco en formar parte de una Misión Análoga a Marte organizada por The Mars Society, logrando germinar una semilla en suelo similar al marciano.

Egresado de la Maestría en Ciencias en Ingeniería Bioquímica del TecNM/Instituto Tecnológico de Tuxtla Gutiérrez, Héctor Palomeque Domínguez formó parte de un equipo internacional conformado por 7 integrantes de 6 países (España, Italia, Perú, Reino Unido, Colombia y México).

Mtro. Héctor Palomeque Domínguez

El equipo vivió durante 15 días en la base Mars Desert Station, ubicada en el Desierto de Utah, E.U., haciendo experimentos de investigación relevantes para la llegada y el establecimiento del ser humano en Marte, en una simulación de cómo sería vivir en el Planeta Rojo.

Se prepararon previamente durante un año, aprendiendo los procedimientos, códigos y procesos antes de ser trasladados a la base para vivir la simulación. Héctor fue asignado como Greenhab Officer, siendo responsable de operar el invernadero y mantener saludables las plantas cosechadas para el consumo del equipo.

La Base Mars Desert Station, ubicada en el Desierto de Utah, E.U.

Dentro del invernadero Héctor Palomeque realizó un experimento de investigación trabajando con bacterias que promueven el crecimiento de las plantas como una estrategia para fertilizar el suelo. Estas bacterias, además de ser promotoras del crecimiento vegetal, fueron obtenidas a partir de muestras del suelo de la central de Chernobyl y de Fukushima, con la finalidad de tener organismos adaptados a ciertos niveles radiación, ya que la atmósfera de Marte tiene estas características. Héctor Palomeque platica como se involucró en este proyecto:

“Siempre he estado interesado en involucrarme en las ciencias espaciales, y fui buscando organizaciones y oportunidades que me acercaran a esta área. En 2016 tuve la oportunidad de asistir al 67 Congreso Internacional de Astronáutica (IAC 2016) organizado por la Agencia Espacial Mexicana (AEM) en Guadalajara, Jalisco.

Ahí pude conocer al Space Generation Advisory Council quienes han colaborado con The Mars Society. A través de ellos vi la convocatoria lanzada para conformar el equipo LATAM III; apliqué con un proyecto de investigación que desarrollé en la maestría, y tuve la fortuna de ser seleccionado”

Recolección de muestras para la formulación del suelo similar al de Marte.

México ya ha tenido representantes de nuestro país en las misiones de The Mars Society, sin embargo, Héctor es el 1er Chiapaneco en formar parte de una Misión Análoga de éste tipo, organizada por esta organización.

Para su investigación, Héctor Palomeque recolectó distintas muestras del suelo que se encuentra alrededor de la Base y usando información científica sobre el regolito marciano, formuló un suelo muy parecido al de Marte. En esta simulación del suelo marciano, aplicó las bacterias aisladas y sembró 144 semillas (96 de lechuga y 48 de tomate).

“Elegí estas semillas para ser biofertilizadas debido a su rápido crecimiento. Y a pesar de haber tenido diversos retos en el proceso, al final del experimento se logró obtener un brote de lechuga comparte Palomeque Domínguez sobre los logros alcanzados en la misión.

Brote de lechuga en el suelo formulado por Héctor Palomeque.

Debido al corto tiempo asignado al equipo para su estancia en la base, aún no se ha comprobado como influyeron las bacterias en la actividad del brote. Sin embargo, el resultado y la información obtenidas da pie a que el experimento pueda ser replicado con más tiempo y con otras semillas, para obtener resultados científicos publicables.

La misión ha significado para Héctor no sólo un logro profesional y científico, si no también destaca el impacto a nivel personal que la simulación tuvo en todo el equipo.

Héctor Palomeque (con el número 9) durante un recorrido en el desierto.

“Esta experiencia, también medía el impacto psicológico que el aislamiento tenía en nosotros, y la capacidad de cada uno para enfrentarlo. Tuvimos una comunicación muy limitada con el exterior para simular lo más posible las condiciones en Marte. No teníamos internet de alta velocidad, y teníamos un horario fijo para levantarnos, comer y realizar los reportes diarios.

Las caminatas debían solicitarse con un día de anticipación y siempre con traje espacial, todo estaba controlado y calendarizado, pues éste tipo de misiones puede definir que alguno de los participantes termine siendo un astronauta comparte Palomeque sobre su vivencia.

Héctor ahora busca ser un vocero de éste tipo de programas, y apoyar a que otros jóvenes puedan participar en este tipo de experiencias.

“Yo los invito a que busquen las convocatorias de estas organizaciones y se animen a estudiar otro idioma, especialmente el inglés, ya que estos programas se llevan a cabo totalmente en esta lengua. Los invito a que se motiven y se inspiren; nosotros sabemos improvisar con lo poco que tenemos y eso nos da mucho valor a los Mexicanos expresa Héctor.

Interior del hábitad ubicada en la base.

Al preguntarle cómo se siente al haber participado en esta experiencia, él comenta:

“Me siento muy orgulloso y muy feliz. Esta experiencia me ha dejado muchas lecciones de vida. Siento que esto me ha dado un crecimiento personal y hasta espiritual, es algo que nunca se puede olvidar.  

Todos en el equipo tuvimos nuestro “momento marciano”; es ese instante en el que estás haciendo tus actividades con el traje espacial puesto, en un lugar en el que el paisaje es muy rojo y árido, y por un momento sientes que realmente estás en Marte. 

Me siento muy entusiasmado y muy inspirado para seguir con mi formación en el área espacial y apoyar a quienes quieran hacer lo mismo, porque esto es trabajo colaborativo, nunca individual. Siempre hay que trabajar en equipo, siempre hay que apoyar y tenderle la mano al otro para que también haga lo mismo y llegue tan lejos como tú o más; porque una persona no va a llegar a la Luna ni a Marte sola. Esto es una colaboración internacional y debemos tener la mentalidad de apoyarnos mutuamente siempre”.

Equipo LATAM III instalados en el Desierto de Utah.